La decisión ya está tomada; Londres es tu próximo destino. Sin embargo tienes mucha ansiedad por saber donde vivir, trabajar o estudiar. Mudarse a otra ciudad puede ser un proceso pesado y estresante. En este artículo te doy algunos consejos basados en mi experiencia personal para ayudarte a disfrutar tu nuevo hogar y evitarte algunos percances.

1. Descubre Londres y encuentra tu vecindario

Londres es una ciudad enorme con muchísimo que ofrecer. Así que el primer paso antes de pensar en dónde vivir es encontrar el barrio que te guste más y se acomode a tus necesidades.

Basándote en tu presupuesto y prioridades, toma al menos un día para explorar las distintas zonas de la ciudad. Esto tu ayudará a encontrar tu nuevo vecindario y conocer las culturas establecidas en esa área. Si no sabes donde comenzar, visita  mapas de Londres en donde encontrarás datos de precios de rentas según la ubicación y nombres de los distintos distritos y ayuntamientos.

En cuestión de seguridad, Londres es una ciudad segura, sin embargo, hay zonas que querrás evitar. Visita: Zonas seguras e inseguras de Londres, para saber tener información al respecto.

2. Encuentra tu vivienda ideal

Al saber en que área vivir, buscar una habitación o apartamento será una tarea más sencilla. Sin embargo, en este proceso, será importante determinar el tipo de vivienda: apartamento, habitación doble o individual, estudio o una vivienda familiar. También, deberás definir si deseas estar cerca del trabajo, priorizar tu tranquilidad, vivir lejos o estar rodeado de restaurantes y tiendas. Visita Vivir en Londres para encontrar más consejos que te ayuden a tomar una decisión.

3. Conoce tus vecinos

Encontrar tu vivienda ideal y saber si vivir solo o compartiendo es esencial; será vital también conocer tus vecinos.  Aprovecha el día de tu cita con la agencia o el dueño que renta, para hacer preguntas que te conciernen. Si fuman, si hacen fiestas, si cocinan, si hay niños, si hay animales, etc. No estará demás preguntar porque serás tú quien se aguante lo que no te guste.

4. Lee y firma el contrato

Un error común es pensar que todo está concluido una vez que nos ha dado el sí. En realidad, un simple sí puede involucrar varios percances. Entonces, asegúrate de obtener un contrato. Léelo bien y firmarlo. Las condiciones deberán ser justas y deberá incluir un cláusula que garantice la devolución de tu depósito al finalizar el periodo de arrendamiento.